viernes, 19 de agosto de 2011

EL DETECTIVE

(Saber preguntar - Escucha activa - Pensamiento Crítico -EP)



OBJETIVO.

Conseguir que el alumnado tome conciencia de la importancia de un adecuado uso de las preguntas, de saber escuchar, la reflexión y el razonamiento como forma de conocer la verdad.

¿CÓMO SE JUEGA?

Lo primero que debemos hacer es recortar tantos pedazos de papel como alumnos involucremos en la dinámica.
Todos estarán en blanco, excepto dos que estarán marcados; uno con una X y otro con una O.
Se doblarán y se meterán dentro de un recipiente.
Cada participante tomará un papel y lo observará sin dejar que otro compañero lo haga.
Aquel que saque el papel marcado con una Cruz será el que hará las veces de Asesino, aquel con la O, será el detective.
Sin decir a nadie el papel que le tocará interpretar, cada alumno volverá a poner los papeles en el recipiente.
Lo siguiente será que el detective, saldrá fuera.
A continuación, se pedirá a todos que cierren sus ojos. El asesino tocará a otro de los participantes, este gritará y caerá muerto.
En ese momento, el detective entrará y comenzar a averiguar quién ha sido el culpable.
El detective comenzará a hacer preguntas, mientras que los participantes tendrán que responder, aunque no necesariamente diciendo la verdad. Podrán hacerlo o inventar cualquier otra cosa, por ejemplo: “que no escucho nada porque en ese momento se encontraba paseando al perro”
El detective tendrá tres oportunidades para adivinar, pudiendo formular tantas preguntas como crea necesario.
Finalmente, el animador propondrá al grupo un análisis sobre la importancia de manejar bien las preguntas, el saber escuchar para obtener información valiosa y confiable, y como podemos usar esto en la vida cotidiana.

OBSERVACIÓN.
Es posible buscar al sujeto culpable de haberse comido una galleta o de esconder un juguete, hay mucha diversidad de ideas posibles.
Lo interesante de la dinámica es que generalmente, aún si todos los alumnos mienten, el culpable saldrá a la luz, ya que los culpables se ven más culpables que los demás y suelen delatarse ellos mismos.